sábado, 31 de diciembre de 2016

COMUNICARSE A TRAVÉS DE LA RED

       COMUNICARSE A TRAVÉS DE LA RED 

PUNTO DE PARTIDA

El alcance y problemática de las TIC en los centros educativos (universidad incluida) abarca tres ámbitos fundamentales: los contenidos –tanto docentes como investigadores-, el modelo de enseñanza y el modelo de organización, apàrte del modelo de comunicación o relación. 

Partimos de entender la Enseñanza Virtual (On-Line) como el: “sistema de impartición de formación a distancia, apoyado en las TIC que combina distintos elementos pedagógicos: Instrucción clásica (presencial o autoestudio), las prácticas, los contactos en tiempo real (presenciales, videoconferencias o chats) y los contactos diferidos (tutores, foros de  debate, correo electrónico)” (FUNDESCO, 2000) Y ello porque asumimos que el uso de las TIC no es igual en todos los casos. Del uso de las TIC podemos establecer la siguiente clasificación: De apoyo a la enseñanza presencial, de apoyo a la enseñanza semipresencial, como mediador del proceso de enseñaza presencial-virtual. En esta última etapa es cuando el potencial de Internet se ofrece como herramienta docente desde diversas perspectivas:

a) Como complemento a la docencia presencial
b) Como soporte de la gestión
c) Como aula virtual efectiva

De este entramado de posibilidades se pueden extraer diferentes situaciones de aprendizaje (tabla 1).



Las instituciones educativas se inclinan a implantar modelos de formación on-line por las ventajas que esta modalidad ofrece en su estructura y, más concretamente, en los procesos de enseñanza y aprendizaje. Autores como Hannum (2001) recogen algunas de ellas:

Tabla 2

A partir de autores como: Calés, (2003). Cantón (2000), y Ohlendorf (2000) podríamos establecer  que las razones para el uso de las TIC en la docencia son:

Tabla 3

A pesar de todo, deben considerarse también los riesgos y desventajas que supone implantar este tipo de formación, tanto desde el punto de vista organizativo como didáctico. Clark (cit. Marchessou, 2000) decía que en un proceso de aprendizaje el medio tecnológico elegido ‘no tiene más impacto sobre el propio proceso que el tipo de camión sobre la calidad de los alimentos que trae al supermercado’. A pesar de eso, los fracasos en el uso de las tecnologías educativas proceden de (Marchessou, op. cit): De la escasez de definición del marco institucional, de la ausencia de formación del personal, de las exigencias de la comunicación pedagógica o de la falta de alianzas creativas de medios.

viernes, 30 de diciembre de 2016

EL APRENDIZAJE POR COMPEENCIAS (PARA EL TRABAJO)

E     APRENDIZAJE POR COMPETENCIAS

Las competencias intentan poner el relación los ámbitos formativo y laboral (Al menos en el planteamiento que queremos hacer aquí,). Para ello el referente suele ser el ÁMBITO PROFESIONAL, que, en el caso de la formación no se puede definir solamente por PERFILES PROFESIONALES, sino también por PERFILES CIENTÍFICOS. Ambos perfiles (el profesional y el científico) deben dar lugar a la definición de COMPETENCIAS PROFESIONALES y al CURRÍCULO FORMATIVO, que será el encargado de ayudar a que las personas que lo deseen puedan adquirir la formación necesaria para proyectarla en el ámbito laboral de que se trate.
De este modo, podríamos definir ahora las COMPETENCIAS como:
La descripción minuciosa de todas las tareas, deberes, riesgos, obligaciones y responsabilidades que conlleva un puesto de trabajo, así como los requisitos exigidos a la persona “profesional” que pretenda desarrollar ese trabajo (Rial, 1999)
• La descripción de un conjunto de requisitos, destrezas y habilidades inherentes al desempeño profesional que dota al actor de capacidad de pensar, crear, reflexionar y asumir compromiso histórico desde la perspectiva histórico-social (Auccasi, 2003)

O, de otra manera:
  • Un conjunto de conocimientos, procedimientos y actitudes combinados, coordinados e integrados en el ejercicio profesional, definibles en la acción, donde la experiencia se muestra como ineludible y el contexto es clave...Estamos apuntando en la dirección del análisis y solución de problemas en un contexto particular en el que a partir de dicho análisis (y para el mismo) se movilizan pertinentemente todos los recursos (saberes) que dispone el individuo para resolver eficazmente el problema dado” (Tejada, 1999: 27-27).
  • “La competencia o competencias profesionales son un conjunto de elementos combinados (conocimientos, habilidades, actitudes, etc.) que se integran atendiendo una serie de atributos personales (capacidades, motivos, rasgos de personalidad, aptitudes, etc.) tomando con referencia las experiencias personales y profesionales y que se manifiestan mediante determinados comportamientos o conductas en el contexto del trabajo” (Navio, 2001:70).
Los elementos para su definición serían:
  • Especificación de áreas generales y específicos del conocimiento, las que debe dominar el profesional (conocimientos generales y laborales).
  • Especificación y realización de tareas, actividades, acciones en la práctica profesional, sustentado en formación académica, científica y tecnológica
  • Cuerpo de valores y conductas adquiridas que garanticen el desempeño profesional
  • Un perfil de habilidades y destrezas reales y potenciales que tiene que desarrollar
  • Tipo de actividades que debe desempeñar en su profesión
  • Especificación de las actitudes y valores y las poblaciones en que laborará el profesional
A lo largo del tiempo se han entendido estas Competencias de diversos modos: como conjunto de tareas (muy unidas por lo tanto a los “puestos” laborales), como conjunto de atributos (muy próximas a las habilidades o destrezas) o de un modo integrado (tal y como se intentan definir en la actualidad).
En cualquier caso, lo que debe quedar claro es que hoy las COMPETENCIAS tienen componentes tanto personales (atributos y recursos individuales) como relacionados con los contextos de referencia (conocimientos, comportamientos y experiencias)
Aspectos positivos del enfoque de las Competencias (Belisle y Linard, 1996: 28):
  • Explicitan y reconocen los saberes implícitos asociados al trabajo.
  • Ofrecen una alternativa para la selección de los saberes escolares basados en disciplinas
  • Aportan a formadores e instituciones referentes de análisis comunes.
  • Proporcionan un puente entre la acción y los conocimientos, definiendo cualificaciones a partir de comportamientos observables y medibles, claramente definidos y catalogados.
  • Permiten un avance social aplicando las reglas propias de una pedagogía humanista centrada en el aprendiz, otorgándole más control y autonomía en su aprendizaje.
Aspectos negativos (id):
  • Explicitan y reconocen los saberes implícitos asociados al trabajo.
  • Ofrecen una alternativa para la selección de los saberes escolares basados en disciplinas
  • Aportan a formadores e instituciones referentes de análisis comunes.
  • Proporcionan un puente entre la acción y los conocimientos, definiendo cualificaciones a partir de comportamientos observables y medibles, claramente definidos y catalogados.
  • Permiten un avance social aplicando las reglas propias de una pedagogía humanista centrada en el aprendiz, otorgándole más control y autonomía en su aprendizaje.

Tipologías de Competencias (Guerrero, 1999):

  • COMPETENCIAS BÁSICAS: Comunes a todas las ocupaciones e imprescindibles para incorporarse al mercado de trabajo. Facilitadas en los procesos de educación básica y formación inicial
  • COMPETENCIAS TÉCNICO-PROFESIONALES: Específicas de una profesión y que vienen facilitadas por la formación específica (profesional u ocupacional). Pueden ser técnicas, metodológicas, sociales y/o participativas.
  • COMPETENCIAS TRANSVERSALES: Son las comunes en una determinada rama o familia de profesiones u ocupaciones de producción y/o servicios. Por ejemplo, las competencias de la familia profesional de la educación
  • COMPETENCIAS CLAVES: Son las esenciales en las nuevas formas de organización del trabajo. Aquellas que permiten aplicar conocimientos y capacidades en las situaciones de trabajo

jueves, 29 de diciembre de 2016

LAS COMUNIDADES DE APRENDIZAJE

LAS COMUNIDADES DE APRENDIZAJE 
¿Qué son las comunidades de aprendizaje? El concepto de la comunidad de aprendizaje puede ser definido de forma sencilla como un grupo de personas que aprende en común, utilizando herramientas comunes en un mismo entorno
Para que exista una comunidad de aprendizaje, deben darse una serie de condiciones mínimas que resumimos brevemente, pues han sido ya reiteradamente señaladas: 
Cambios institucionales que faciliten el desarrollo de las comunidades de aprendizaje 
• Buscar modelos efectivos para el funcionamiento de las comunidades de aprendizaje 
• Avanzar en las innovaciones técnicas necesarias para permitir que aparezcan las comunidades de aprendizaje, y facilitar herramientas de trabajo que propicien entornos modernos y flexibles. 
• La participación en abierto y de forma horizontal de todos los miembros de la comunidad, no en esquemas jerárquicos y verticales. 
• El acceso de todos en igualdad de condiciones sin tener en cuenta su condición o el lugar donde habiten. 
  • El trabajo colaborativo por grupos.
  • Situar al alumno en el centro de los objetivos del aprendizaje. 
Si estas condiciones se dan, los beneficios de las comunidades de aprendizaje son bien conocidos: 
• El beneficio principal, es que parte del diálogo como pilar central del proceso. Bien gestionado se puede lograr una mayor interacción y participación y mejor atención y relaciones profesor / alumno. 
• La responsabilidad es compartida, por lo que todos los miembros de la comunidad son partícipes en el proceso de aprendizaje. 
• El conocimiento se entiende como dinámico, adquirirlo no supone ingerir una lista de elementos a reproducir en un examen, sino construir una comprensión propia de la materia. 
• Es un proceso activo y colaborativo. Esto ayuda a evitar la pasividad que frecuentemente exhibe el alumnado en otros enfoques. 
Brenson-Lazan (2002. Véase en http://amauta.org ) establece las siguientes etapas de desarrollo en una comunidad virtual de aprendizaje: 
1.Motivación, 2.Socialización, 3.Intercambio, 4.Construcción, 5. Trascendencia y 6. Evolución de la masa crítica 
En cualquier caso parece claro que uno de los usos potenciales de las redes en la educación son las posibilidades que ofrecen para realizar actividades de colaboración entre expertos y profesionales que trabajan en un mismo proyecto o en temas de interés común. En este sentido, existen multitud de herramientas de Internet que ofrecen diversas utilidades (espacios compartidos, toma de decisiones, asignación de tareas, votaciones, gestión de grupos, etc.) que facilitan este trabajo colaborativo. 

A través de las redes los profesores pueden compartir una gran cantidad de información sobre nuevos recursos educativos, temas relevantes para la profesión y nuevas ideas para incorporar a la clase. Las redes posibilitan el acceso a un enorme conjunto de personas que están trabajando en el mismo tema, locales e internacionales y obtener ayuda desde una amplia variedad de fuentes, todo ello desde un enfoque colaborativo del propio desarrollo profesional (Harasim y otros, 1995). 
El trabajo colaborativo entre profesores se basa en la comunicación y en el intercambio de la información. En este sentido, como apunta Salinas (1998), las TIC proporcionan la oportunidad de acceder a una diversidad de servicios como pueden ser: 
• De obtención de servicios especializados de información que existen en cada campo académico y profesional y que suelen ser accesibles para los miembros de la disciplina o de la profesión. 
• Intercambio de nuevos conocimientos surgidos tanto de la investigación básica y aplicada como de la práctica profesional a través de revistas electrónicas, conferencias electrónicas y listas de discusión. 
• Colaboración para mejorar las aptitudes y resolver problemas. Este tipo de colaboración es requerida más que el simple intercambio de información. Intercambio de ideas, compartir experiencias y discutir soluciones a las dificultades que se dan entre profesores, por ejemplo, pueden dar lugar, a través de redes, a grupos de trabajo mucho más amplios y diversos. 
• Colaboración para crear nuevo conocimiento. Distintas personas trabajan juntas durante largos periodos para lograr metas compartidas: un grupo de profesores desarrollando materiales curriculares o escribiendo un artículo en común, la realización de investigaciones y proyectos de innovación por equipos de profesores de distintos centros, el intercambio de borradores y planes de trabajo.... constituyen típicos ejemplos de esta categoría. En gran medida, estos sistemas aplicados al aprendizaje, recogen gran parte de las características de los sistemas de teletrabajo, o del teleintercambio. 
Principales características de las herramientas para el trabajo colaborativo a través de la web: 
Multiplataforma: Algunas herramientas son multiplataforma, ya que utilizan estándares que pueden ser visualizados en cualquier ordenador, Mac, PC; Unix, etc.
Utilizan un navegador: Los usuarios acceden a la información a través de navegadores existentes en el mercado (como Nestscape o Explorer) 
Estructura cliente/servidor. En el caso de las herramientas con la estructura cliente-servidor, no se requiere la instalación del software en el ordenador de usuario sino que este se conecta al servidor que lo contiene. 
Así pues, desde el concepto de interactividad, la extensión de las tecnologías de la información y de la comunicación ha dado pie a una nueva forma de organización humana, a una nueva manera de organizarse alrededor de algún aspecto en común. Nos referimos a una particularidad dentro de los procesos de interactividad, proporcionados por las potencialidades de las TIC: hablamos de las Comunidades Virtuales. Sin necesidad de conocerse físicamente, el teclado, la pantalla y la red son los únicos elementos de interconexión que les une y les relaciona, además de la preocupación y el interés por un tema o actividad en común. La educación, la política, la economía, los aspectos sociales, etc., son temas que aglutinan a un grupo de personas en el afán de intercambiar información y experiencias, charlar, trabajar conjuntamente...


En este sentido, Polo (1998) afirma que podemos encontrar tres tipos distintos de comunidad virtual: 
•Comunidad centrada en las personas: Aquí la gente se reúne fundamentalmente para disfrutar del placer de su mutua compañía. El chat es el medio de comunicación más utilizado donde la gente se aglutina para hacer amigos, intercambiar opiniones, buscar compañía (de cualquier tipo) o simplemente para pasar un rato agradable y entretenido. Destaca el carácter síncrono de esta actividad. 
•Comunidad centrada en un tema. La Tecnología Educativa, por ejemplo, puede ser y es un tema que concentra a un determinado número de personas con el deseo de intercambiar contenidos, crear conocimiento, elaborar proyectos, etc. En este caso, los foros de discusión o las lista de distribución son los mecanismos más indicados para la comunicación, donde la asincronidad permite a los diferentes participantes interactuar de manera continua –los mensajes están expuestos más tiempo-, y en función de su disponibilidad. Los mensajes, en este caso, son de mayor longitud e incluyen argumentaciones, no simplemente opiniones. 
  • Comunidad centrada en un acontecimiento. Se trata de una agrupación de personas interesadas en un acontecimiento externo concreto, como pueden ser los oyentes de un programa de radio o los participantes en un chat de invitados. A diferencia de los tipos anteriores, aquí los miembros de la comunidad coinciden en una ocasión concreta (el acontecimiento) y pueden no volver a verse más o no tener más contacto entre sí. 


Este fenómeno se ha extendido de manera considerable a través de la red, posibilitando el contacto y ofreciendo servicios diversos a todos aquellos que interactúan en un espacio (virtual) determinado.

miércoles, 28 de diciembre de 2016

DEL TRABAJO COLABORATIVO A LAS COMUNIDADES VIRTUALES A TRAVÉS DE LA RED

DEL TRABAJO COLABORATIVO A LAS COMUNIDADES VIRTUALES A TRAVÉS DE LA RED 
Internet viene siendo considerada como una gran base de datos de cobertura global, más que como un lugar en donde poder llevar a cabo un trabajo concreto, al menos si nos atenemos a los datos de su uso . En este contexto, herramientas clásicas como el correo electrónico y las listas de distribución no son capaces de ofrecer todo el soporte necesario para la realización de trabajos en grupo a través de la Red y, a partir de ese hecho, se están desarrollando las aplicaciones denominadas “groupware” para Internet, que ofrecen a los usuarios el pilar básico desde el cual promover el trabajo colaborativo a través del web. Entre estas herramientas podemos encontrar BSCW, que ofrece un soporte idóneo para la creación de zonas en donde compartir documentos comunes. 
Parece claro que las tareas y productos del trabajo en colaboración son mayores que los conseguidos a partir del que se elabora individualmente y esta cuestión es especialmente importante cuando se trata de realizar tareas dentro de una estructura de investigación o de una organización. Gracias a este tipo de software para el trabajo en grupo es posible mejorar el rendimiento de todo el proceso de indagación y se hace posible que diferentes personas puedan trabajar de forma compartida con una misma información y cooperar estrechamente en el desarrollo de proyectos. 
En este contexto, las funciones básicas que se consiguen llevar a cabo con su utilización son, según Hills (1997), las siguientes: 
Ayuda a que dos o más personas trabajen juntas. 
Permite compartir conocimientos y experiencias. 
Automatiza sus actividades. 
Ayuda a crear una memoria de la organización. 
Aúna geografía y tiempo.


Este tipo de herramientas han de permitir compartir toda clase de conocimiento y facilitar el movimiento y control de la información que se manipula constantemente. Los módulos que deben integrar serían: 
Calendario y planificación. 
Videoconferencia. 
Sistemas de reunión electrónica. 
Pizarra electrónica y conferencia de datos. 
Conversación (chat). 
Correo electrónico. 
Conferencia y grupos de noticias. 
Almacenes de conocimiento. 
Escritura en grupo y edición compartida. 
Flujo de trabajo.

Y, en la medida en que sea si, los “groupware” aportarían soluciones para cada uno de los momentos o situaciones que puedan producirse durante la evolución de esta colaboración.
A pesar de las ventajas que presentan, su uso no ha sido generalizado en las organizaciones en donde se desarrollan este tipo de tareas. Las razones pueden ser variadas y guardar relación tanto con los costes, como con el mantenimiento técnico de las infraestructuras o con la cultura o actitudes de los participantes en tareas de colaboración. 
En este contexto se ha desarrollado con fuerza la implementación del sistema BSCW (Basic Support for Cooperative Work), que es capaz de realizar prácticamente todas las capacidades del groupware y las básicas del workflow de forma eficaz, pero sin que el coste sea un problema.


Básicamente aporta las siguientes ventajas en lo referente al desarrollo de tareas en grupo a través de la Red (http://www.rediris.es/cvu/index.es.html ): 
Creación de zonas para el trabajo colaborativo entre varios miembros (que pueden, o no, estar lejanos geográficamente o pertenecer a diferentes organizaciones) desde donde compartir documentos para llevar a cabo proyectos comunes. 
Entrada restringida a esas áreas mediante un acceso controlado, permitido solamente a miembros previamente registrados y, en los casos que sea necesario, limitar sus posibilidades de manipulación de la información. 
Documentos siempre disponibles para todos los componentes del proyecto en cualquier momento, pues se encuentran almacenados en el servidor BSCW y no en ordenadores locales. 
Permite almacenar en un mismo espacio todos los tipos de objetos que puedan resultar útiles en el desarrollo del trabajo colaborativo: documentos de texto, bases de datos, imágenes, sonidos, anotaciones sobre los mismos, comentarios, listas de direcciones, etc. 
BSCW hace posible entender el web como un lugar en donde manipular la información y no sólo leerla o tener acceso a ella, pues admite su modificación. 
Una vez que se ha creado un documento concreto y quiere hacerse público, es muy fácil disponer de él desde cualquier página web mediante la inclusión de su URL, sin necesidad de abrir una cuenta FTP. 
Puede convertirse en la puerta de acceso a reuniones o citas entre los miembros, ya sea en encuentros presenciales o a través de la Red (chat, videoconferencia) pues ofrece los medios básicos para realizar sus convocatorias. 
Presenta ciertas aplicaciones que pueden ser entendidas dentro de un contexto de workflow o flujo de información como lo es el hecho de que integra herramientas de comunicación de eventos entre sus miembros. 

Sin embargo, el mayor problema de las herramientas groupware para Internet se encuentra en su propia filosofía y las características de BSCW. La comunicación en el web está basada en el protocolo de intercambio de datos HTTP y en una estructura cliente-servidor, a la que ya se le podría denominar de "clásica". Además, al trabajar con HTML, se crea un entorno de colaboración bidimensional que no hace posible la comunicación simultánea entre cliente-cliente. En otras palabras, actualmente es imposible que, con BSCW, dos miembros o más puedan actuar sincrónicamente con un mismo documento. 

lunes, 26 de diciembre de 2016

EL TRABAJO COLABORATIVO Y LAS COMUNIDADES DE APRENDIZAJE 
 EL TRABAJO COLABORATIVO VIRTUAL O TELEMÁTICO  (+2: cont:.)

Aparte de esa visión que hemos expuesto en la entrada anterior, otros autores, como García (2002) lo han hecho por categorías, destacando : colaboración y trabajo en grupo , búsqueda y recuperación de información, gestión documental y especialización en gestión del conocimiento. 
Según las categorías anteriores, tenemos los siguientes grupos de productos comerciales para la gestión del conocimiento : 
Productos cuyo objetivo es soportar la colaboración y el trabajo en grupo. Estos sistemas hacen uso, mayoritariamente, de las funciones interactivas comentadas en la clasificación anterior.
Productos para la búsqueda y recuperación de información (information retrieval). Se puede decir que son sistemas para la gestión del conocimiento integrativo, y a que hacen uso de algunas de las funciones integrativas de los Sistemas de Gestión del Conocimiento comentadas en la clasificación anterior. Los desarrolladores de productos para este fin que estuvieron entre los primeros en posicionarse en el área de gestión del conocimiento fueron: Verity (http://www.verity.com/), Excalibur (http://www.xr . com) y Hummingbird (http:/ / www.hummingbird.com/) . 
Productos para la gestión documental, ya que otro ámbito pionero en la gestión del conocimiento es la gestión documental. Estos productos ofrecen funcionalidades de gestión del conocimiento, como son el almacenamiento, la búsqueda y la recuperación de documentos. Algunos de los principales productos de esta categoría sn : Livelink (http://www.opentext.com/livelink ) y Documentum5 (http://www.documentum.com/). 
Finalmente , están los productos específicos de gestión del conocimiento. ejemplos de estos son: Organik,(http://www.orbital.com.uk/),SERbinware ,(http://www.ser.com/), y Meta4 KnowN e t, (http://www.meta4.com).
A la hora de analizar los sistemas concretos de integrar el conocimiento hay que cuidar aspectos como: 
o El tratamiento del conocimiento: integración, estructuración y distribución del conocimiento 
o La gestión de los usuarios 
o Los servicios de cooperación y comunicación 
o Servicio de notificación de eventos 
o Servicio de estadísticas 

o Servicio de control de versiones de los elementos de conocimiento manejados. 

EL TRABAJO COLABORATIVO Y LAS COMUNIDADES DE APRENDIZAJE EL TRABAJO COLABORATIVO VIRTUAL O TELEMÁTICO (continuación)

EL TRABAJO COLABORATIVO Y LAS COMUNIDADES DE APRENDIZAJE 
 EL TRABAJO COLABORATIVO VIRTUAL O TELEMÁTICO  (continuación)

Diferentes teorías del aprendizaje encuentran aplicación en los ambientes colaborativos; entre éstas, los enfoques de Piaget y de Vygotsky basados en la interacción social. Lo innovador en los ambientes colaborativos soportados en redes virtuales es la introducción de la informática a estos espacios, sirviendo las redes virtuales de soporte, lo que da origen a los ambientes CSCL (Computer-Support Collaborative Learning - Aprendizaje colaborativo asistido por computador). 
Podría definirse el aprendizaje colaborativo como: 
El conjunto de métodos de instrucción y entrenamiento apoyados con tecnología así como de estrategias para propiciar el desarrollo de habilidades mixtas (aprendizaje y desarrollo personal y social), donde cada miembro del grupo es responsable tanto de su aprendizaje como del de los restantes miembros del grupo
El aprendizaje es un proceso individual que puede ser enriquecido con actividades colaborativas tendientes a desarrollar en el individuo habilidades personales y de grupo. 
Elementos básicos para propiciar el aprendizaje colaborativo 
• Interdependencia positiva
• Interacción
• Contribución individual
• Habilidades personales y de grupo 
Diferencias entre CSCW (Trabajo Colaborativo) y CSCL (Aprendizaje Colaborativo) 

Para Torres (2004) una Comunidad de Aprendizaje es 

“una comunidad humana organizada que construye y se involucra en un proyecto educativo y cultural propio, para educarse a sí misma, a sus niños, jóvenes y adultos, en el marco de un esfuerzo endógeno, cooperativo y solidario, basado en un diagnóstico no sólo de sus carencias sino, sobre todo, de sus fortalezas para superar tales debilidades. 

La diversidad de usos de la noción Comunidad de Aprendizaje está atravesada por tres ejes fundamentales: el eje escolar/no-escolar o extra- escolar, el eje real/virtual, y el eje que hace referencia a la gran gama de objetivos y sentidos atribuidos a dicha Comunidad de Aprendizaje. Así, la Comunidad de Aprendizaje remite en unos casos al contexto escolar y, más específicamente, a la escuela o incluso al aula de clase; en otros, a un ámbito geográfico (la ciudad, el barrio, la localidad); en otros, a una realidad virtual y a la conectividad mediada por el uso de las modernas tecnologías de la información y la comunicación (redes de personas, de escuelas, de instituciones educativas, de comunidades profesionales, etc.). Por lo general, sobre todo en los países desarrollados, la noción de Comunidad de Aprendizaje viene aplicándose a comunidades y realidades urbanas. Asimismo, unos vinculan la Comunidad de Aprendizaje a procesos de desarrollo económico, desarrollo de capital social o de desarrollo humano en sentido amplio; otros ponen el acento en torno a categorías de ciudadanía y participación social. En general, lo que predomina hasta hoy es la noción de comunidad más que la de aprendizaje. De hecho, salvo quizás por algunas versiones de Comunidad de Aprendizaje más apegadas al ámbito escolar, hay escasa atención sobre los aspectos pedagógicos”.Para esta autora una Comunidad de aprendizaje:


Es una propuesta educativa comunitaria y solidaria, cuyo ámbito de concreción es la sociedad local. 
•Parte de la premisa de que toda comunidad humana posee recursos, agentes, instituciones y redes de aprendizaje operando 
•Adopta una visión amplia de lo educativo 
•Involucra a niños, jóvenes y adultos, valorando el aprendizaje
inter-generacional y entre pares 
•Estimula la búsqueda y el respeto por lo diverso, 
•Busca mostrar la importancia y el potencial que tiene el desarrollo de sistemas de aprendizaje generados y desarrollados a nivel local 
•Se propone como un modelo de desarrollo y cambio educativo de abajo hacia arriba y de adentro hacia fuera 

Pero no quisiéramos ir por este camino. A nosotros no interesa más el trabajo colaborativo en tanto que se erige en un sistema óptimo para la gestión del conocimiento. 
La gestión del conocimiento, entendida como el proceso de propiciar un conocimiento comunitario, ha venido siendo objeto de análisis desde hace tiempo y, en este sentido, ha tenido una evolución que es preciso establecer de algún modo para ubicarse convenientemente, máxime cuando lo que intentamos es apoyar el trabajo colaborativo. 
Esa evolución que decimos ha ido pareja al desarrollo de los instrumentos que han ido soportando el conocimiento y puede establecerse desde diferentes criterios. Autores como Maier (2002) han optado por la funcionalidad y destacan tres grados o momentos en su evolución:

Los Sistemas de Gestión del Conocimiento con grado de evolución básico: son aquellos que implementan las funcionalidades básicas, tales como las que dan soporte al trabajo en grupo: foros de discusión, mensajería, etc.
El siguiente estadio evolutivo lo componen los Sistemas de Gestión del Conocimiento integrativos: dan soporte a la codificación del conocimiento así como a la búsqueda y recuperación, también dan soporte a la administración de repositorios de conocimiento y a la organización de estructuras de conocimiento. Estos Sistemas de Gestión del Conocimiento dan soporte a la manipulación de elementos de conocimiento. Dentro de un Sistema de Gestión del Conocimiento integrativo, se pueden encontrar funcionalidades de las tres categorías siguientes: búsqueda y presentación de conocimiento (sistema de metabúsqueda, suscripciones de información, clasificación de elementos de conocimiento, etc.), adquisición, publicación y organización del conocimiento (enlace de elementos de conocimiento, análisis semántico de elementos de conocimiento, etc.) y administración (informes sobre elementos de conocimiento).
El tercer estadio lo componen los Sistema de Gestión del Conocimiento interactivos: dan soporte a procesos de gestión del conocimiento como localización de expertos y construcción de comunidades, también proporcionan espacios compartidos para las comunidades e instrumentos de aprendizaje electrónico. Estos Sistemas de Gestión del Conocimiento hacen especial énfasis en los actores que intervienen en la gestión del conocimiento. Un Sistema de Gestión del Conocimiento interactivo se dirige hacia la compartición del conocimiento directo o el desarrollo conjunto de conocimiento entre expertos y/o usuarios del conocimiento o entre proveedores de conocimiento y buscadores de conocimiento. Las funciones de un Sistema de Gestión del Cocnocimiento interactivo se dividen en los tres grupos siguientes: comunicación y cooperación de conocimiento (toma de decisiones en grupo, compartición de aplicaciones), tele-enseñanza y administración (informe sobre participantes)


domingo, 25 de diciembre de 2016

25 DE DICIEMBRE

No es día de exposiciones más o menos atractivas, es día de reflexión personal, de planteamiento de nuevos objetivos vitales, de propuestas personales de desarrollo y mejora.

Dejo dos frases (copiadas) como incentivo y como expresión de mis mejores deseos para todos.





sábado, 24 de diciembre de 2016

EL TRABAJO COLABORATIVO Y LAS COMUNIDADES DE APRENDIZAJE EL TRABAJO COLABORATIVO VIRTUAL O TELEMÁTICO

EL TRABAJO COLABORATIVO Y LAS COMUNIDADES DE APRENDIZAJE 
 EL TRABAJO COLABORATIVO VIRTUAL O TELEMÁTICO 
Como indicábamos al comienzo, los ambientes telemáticos proporcionan una mayor “democratización” tanto en lo que se refiere al acceso a información como a publicación. Este ambiente es construido por miles de personas que están ínter ligados formando una verdadera tela que propicia una construcción de un “saber colectivo” (Lévy 1996). Estos ambientes están revolucionando las nociones de tiempo y espacio, debido a la rapidez con que los objetos son transportados y a las distancias alcanzadas. Tomando en consideración esas potencialidades que caracterizan los ambientes telemáticos, está claro que disponemos de medios importantes y potentes para la realización de trabajos colaborativos y aun para la cooperación misma. 
Uno de los aspectos fundamentales para soportar la cooperación es la interacción, como hemos querido indicar en el recorrido que hemos planteado. Esa interacción se puede clasificar bajo distintas coordenadas: 
De acuerdo a la temporalidad
a) Sincrónica: Esta interacción ocurre en tiempo real, esto es, los interlocutores se encuentran ligados simultáneamente en red y utilizan recursos que permiten a los participantes acompañar a lo que los otros desean comunicar. 
b) Asincrónica: Los interlocutores se comunican sin establecer un ligamento directo.
  • Según el número de Interlocutores:
a) Uno para uno: la comunicación ocurre entre dos individuos, pudiendo ser sincrónica o asincrónica. 
b) Uno para todos: un usuario se comunica con varios receptores, los cuales pueden también volverse emisores, comunicándose con quien inició la interacción. Esta Comunicación puede ser sincrónica o asincrónica. 
c) Todos para Todos: Comunicación entre múltiplos usuarios, de modo integrado. Esta comunicación puede ser también sincrónica o asincrónica. 

¿Cómo justificar el trabajo colaborativo telemático?. Las instituciones de formación actuales, tal como fueron concebidas para la sociedad industrial, no están preparadas para satisfacer las exigencias de la sociedad del próximo milenio (a la que ya se denomina la sociedad de la información y del conocimiento) y que tiende claramente hacia la globalización del mercado y la movilidad geográfica y laboral lo que comportará, necesariamente, una mayor demanda de formación. Tiffin y Rajasingham (1997) plantean la existencia de un sistema educativo nacional, cuya unidad de organización es la escuela, el grupo es la clase y la díada es alumno-profesor frente a un emergente sistema de teleaprendizaje, organizado por consorcios regionales, cuya unidad de organización es el telecurso y la díada es alumno-PC 
Ante ello, todos los niveles del sistema educativo se encuentran ante la necesidad de cambiar para recobrar pertinencia social. Si esto es cierto para el sistema de enseñanza formal reglada en general, lo es aún más para la Universidad una institución que se tacha, con mucha frecuencia, de inmovilista. Al respecto apunta Tünnermann (1998: 211):" Ignorar o perecer es el reto que hoy día enfrentan las universidades... El paradigma de la universidad actual responde a la sociedad industrial, que está en proceso de profunda mutación, pero que aún no da paso a la sociedad postindustrial o postmoderna que deberá sustituirla". 
Los cambios que están experimentando las universidades tradicionales presenciales están muy relacionados con la adopción de nuevas metodologías a partir de la introducción, a veces masiva, de los últimos avances tecnológicos en el proceso de E-A. En este escenario de renovación de la pedagogía universitaria está adquiriendo cada vez más importancia el trabajo colaborativo como opción metodológica o en todo caso como una nueva manera de concebir el proceso de aprendizaje, principalmente cuando nos situamos en entornos tecnológicos de formación y en estrategias de formación que tienen como apoyo fundamental las redes telemáticas. 
El trabajo colaborativo, como hemos visto, tiene como objetivo fundamental desarrollar la dimensión social, tanto de los procesos de E-A como del propio aprendizaje de los alumnos o de los mismos profesores. El aspecto clave dentro de la dimensión social del aprendizaje es el valor de la relación entre iguales, lo cual descarta la idea de que para aprender es indispensable seguir instrucciones de alguien más competente, como el maestro. Este es el concepto nuclear para explicar el aprendizaje colavorativo que Turoff (1995: 5) define así: "..Collaborative learning is defined as a learning process that emphasizes group or cooperative efforts among faculty and students. It stresses active participation and interaction on the part of both students and instructors. Knowledge is viewed as a social construct, and therefore the educational procewss is facilitated by social interaction in a environment that facilities peer interaction, evaluation and cooperation"

De la unión entre los conceptos clásicos del aprendizaje colaborativo y del trabajo colaborativo y las nuevas tecnologías surge el planteamiento del Aprendizaje colaborativo mediado por ordenador (Computer Supported Collaborative Learning-CSCL). Su origen se remonta al uso de la modalidad de trabajo colaborativo en contextos de trabajo en la empresa, CSCW (Computer Support Collaborative Work), que posteriormente ha empezado a implantarse en el ámbito del aprendizaje escolar dando lugar al CSCL. (Steeples y Mayes, 1998). 
A las herramientas que soportan el CSCW se les denomina comúnmente groupware. Estos productos proveen oportunidades para el Trabajo colaborativo desde localizaciones distribuidas y en tiempos flexibles, permitiendo a los participantes un contexto versátil de colaboración. Schrum y Lamb (1997) consideran al groupware como una nueva categoría de software que ofrece posibilidades para aumentar el uso efectivo de las redes de ordenadores para la formación y la colaboración. 
Una razón especialmente importante en esta amplia aceptación del CSCL en los Entornos Virtuales de Formación es su pertinencia en contextos de aprendizaje adulto, pues provee medios para animar a los alumnos a utilizar el rico potencial que encierran las ideas y perspectivas de los demás. En ese sentido situamos su pertinencia a la enseñanza universitaria. 
Sea cual sea el escenario de cooperación o interactividad adoptado, el profesor se enfrentará a la toma de decisiones en unas variables puntuales, como su propio grado de control de la situación, la valoración, el nivel de estructuración, etc. Además deberá seleccionar los recursos adecuados entre los distintos paquetes de groupware existentes en el mercado. La mayoría de ellos suelen ofrecer agenda ordenada de encuentros en línea, capacidades de interacción síncrona y asíncrona, formación de subgrupos y creación y edición colaborativa de documentos. Son ejemplos de groupware muy conocidos: LotusNotes y Microsoft Exchange, BSCW, Zeno, AlephWeb, etc. 
Las redes de comunicación introducen la posibilidad de potenciar un aprendizaje más flexible y, al mismo tiempo, la existencia de nuevos escenarios del aprendizaje. En cualquier caso, su incorporación es eficaz si son concebidas y aplicadas con el propósito expreso de fomentar el aprendizaje y la colaboración, pues, entre otras cosas, sirvan para crear ambientes virtuales de aprendizaje. 
El desarrollo de las redes de información que ofrecen herramientas como la World Wide Web, los motores de búsquedas, los correos electrónicos, las herramientas para la discusión y la conferencia, para el trabajo en grupo y colaboración, así como las tecnologías de presentación multimedia hacen posible el desarrollo del aprendizaje colaborativo al permitir la interacción entre diferentes personas ubicadas en diversas partes del mundo, de manera relativamente poco costosa. 
El trabajo colaborativo (o cooperativo, según algunas aportaciones) se viene denominando, a través de sus siglas en inglés como CSCW: Computer Supported Cooperative Work. 
Dentro de esa denominación cobra significado otro término, el GROUPWARE, que hace referencia a la tecnología que soporta el CSCW. 
Se define Groupware como: "Procesos intencionales de un grupo para alcanzar objetivos específicos más herramienas de software diseñadas para dar soporte y facilitar el trabajo"(Peter, 1996) 
Se trata, pues, de una estrategia que pretende coordinar actividades de: comunicación, colaboración, coordinación y negociación con el fin de aumentar la productividad en común. Analizando el trabajo cooperativo desde esta óptica, se presenta como el conjunto de estrategias organizacionales, más las herramientas tecnológicas, que pretenden implantar en la organización el trabajo en grupo, tendiente a maximizar los resultados y minimizar la pérdida de tiempo y de información.
 
Las razones para implantar un Groupware serían, según Coleman (1999): 
• Mejor control de costos.
• Incremento de la productividad. • Mejor servicio al cliente.
• Pocas reuniones. 
• Automatización de procesos de rutina. 
• Extensión de la organización: se incluye tanto al cliente como al proveedor. 
• Integración de grupos geográficamente dispersos. 
• Incremento de la productividad a través de más rápidos tiempos de mercadeo. 
• Mejor coordinación globalmente.
• Proveer mejores servicios que diferencien a la organización.
 

Hay que incidir en el hecho de que cuando hablamos de Groupware no sólo hacemos referencia a la tecnología, también a los aspectos sociales inherentes a la colaboración que propicia esa tecnología. De este modo Groupware lo entendemos como tecnología colaborativa, incluyendo, pues,personas y herramientas tecnológicas. 

Las tecnologías propias o susceptibles de crear los ambientes necesarios para desarrollar el trabajo colaborativo, serían:  El Correo y la Mensajería Electrónica, El manejo de Calendario y Agenda, Sistemas de reuniones electrónicas, Sistemas de Conferencia de datos o de escritorio, etc.